El brócoli, de la familia de las crucíferas, es un vegetal duro que posee
altas cantidades de vitaminas A y D, entre otros nutrientes que lo hacen aliado
contra el cáncer, y muy nutritivo.
Disfrútalo de varias maneras con estos consejos:
1. Corta en rodajas el tallo, cocínalo al vapor y luego gratínalo con
queso parmesano y un poco de salsa bechamel.
2. Pica en trozos pequeños la parte de arriba y añádela a un sofrito de
cebolla, luego mezcla con tiras de lomito o de pollo y sazona con salsa
teriyaki y un toque de aceite de sésamo.
3. Pica dejando un poco de tronco, en forma de "arbolito",
cocina al vapor parcialmente y, aún firme, ensarta en una brocheta y termina de
cocinar, barnizando con un poco de mantequilla.
4. Saltea con ajo, cebolla y maíz, mezcla con salsa bechamel y añade a un
plato de pasta.
5. Haz una ensalada de brócoli, con trocitos de tocineta tostados, tiras
finas de cebolla morada y trocitos de queso cheddar, aderezada con un poco de
mayonesa, un toque de vinagre, sal y pimienta.
6. Preséntalos como un "bosque", haz arbolitos al vapor; unta
sobre la base del plato un poco de puré de papas y encájalos para que parezca
un pequeño paisaje. Puedes espolvoreas con "nieve" de queso. Ideal
para animar a los niños a comerlos.
7. Haz un carpaccio vegano de brócoli, picando finas láminas del tallo, y
cocinándolas muy brevemente en un sartén con aceite de oliva. Disponlas sobre
un plato alternadas con lonjas de aguacate, baña con un chorrito de aceite de
oliva, y sazona con sal y pimienta. Puedes dar más sabor y color con tiras del
pimentón.
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